¿TASACIÓN SUPERIOR O INFERIOR?

En Inmobiliarias Madrid ya hemos explicado que las tasaciones de viviendas son necesarias para conseguir una hipoteca. Habitualmente, estas tasaciones suelen rondar, de media, el 10% más del precio real de venta. Tras superar el boom, la brecha existente entre precio de tasación y precio real de venta se ha reducido considerablemente, siempre bajo la supervisión del Banco de España, y es que esta diferencia tiene grandes consecuencias tanto para la banca como para el hipotecado.

La tasación supone un coste que debe asumir el cliente, y tiene una vigencia de seis meses, pudiéndose solicitar libremente y sin que lo imponga la entidad, a cualquiera de las sociedades supervisadas por el Banco de España.

Las tasaciones superiores buscan adelantarse a los precios de compra a corto plazo. Como ventaja para el comprador supone que le permite financiar mayor parte del precio (el importe de los préstamos se fija generalmente en función del valor de tasación y no de compraventa). Además, el banco asegura unos beneficios estables para su inversión mientras dure el préstamo. Sin embargo, una tasación elevada también puede obstaculizar la hipoteca, pues los bancos que quieran titularizar esas hipotecas necesitan que el préstamo no supere el 80% del valor de tasación del inmueble.

Por otra parte, si la tasación es baja, puede suponer como problema para el comprador que el banco le preste menos dinero, por lo que necesitará mayores ahorros. Mucho ojo al fijar el precio de la vivienda, pues no puede ser inferior a su valor fiscal, de lo contrario, el comprador puede hacer frente a una penalización en el momento de liquidar el impuesto de transmisiones patrimoniales. Lo mejor, y lo que defendemos en Inmobiliarias Madrid, es primero dejarse asesorar por expertos conocedores del proceso que nos expliquen cada paso y cada opción para poder comparar y tomar las decisiones correctas con la adecuada información.